Sin noticias de Mou.

Llegaba el Madrid de Mourinho con su aureola de equipo superior, rocoso, goleador y compacto; pero salió ridiculizado del Camp Nou, que presentaba un lleno hasta la bandera con un ambiente espectacular.

Empezaba el partido con un ritmo trepidante por parte del Barça, ya que el Madrid aunque se presentaba con más expectativas que nunca, no acababa de entrar en el partido. En los primeros compases el Barça ya merodeaba con peligro la portería defendida por Iker, el mejor de los blancos ayer, y eso que no tuvo su mejor día, así en el minuto 3 de partido, Messi controló un balón algo escorado, armó la pierna y la puso en el palo contrario con una suave vaselina. Primer aviso. El Madrid en vez de reaccionar se empeñó en colocar su defensa adelantada, lo que facilitó el juego entre líneas de los dos bajitos, Xavi (espectacular su partido) e Iniesta. Así en el minuto 10, Andrés (héroe nacional) mandó un pase entre líneas por alto al que no llega Marcelo, y Xavi ante la salida de Casillas la eleva con sutileza colocando el 1-0.

Después del gol, parecía que el Madrid se estiraba, ya que en un ataque bien llevado por Di María, éste dispara con potencia y colocación a lo que responde Valdés con un paradón, su única intervención en todo el encuentro. Después de esto el Barça siguió a lo suyo, y en el minuto 20 cae el segundo, en una jugada colectiva que define a este equipo, que tocó la pelota de un lado para el otro durante 1 minuto dando 21 pases sin que el Madrid la oliese; así llegó el balón a Villa que desbordó a Ramos, chutó Iker no bloca y Pedro empuja ante la pasividad de Marcelo.

De aquí al descanso, una falta botada por Cristiano muy pegada al palo, y un tiro lejano de Messi que se marchó fuera. También parece que en el 38, Valdés derriba a Cristiano en el área; algo que la caverna mediática cree que iba a producir un cambio en el partido, me da la risa porque tal y como estaba jugando el Madrid no creo que hubiera pasado de ser nada más que el gol de la honra.

Tras el descanso Mou parecía reaccionar, pero con un estilo que sólo él entiende sacando a Lass por Özil, su jugador más creativo, pensando quizás en no recibir más goles, pero…

Así, el Barça siguió a lo suyo, tocando y tocando, pero de una manera brutal como si jugaran desde infantiles juntos; porque tocaban sin ver sabiendo que a donde orientaban el pase allí estaría un compañero. Hasta que en el minuto 9 de la reanudación, empezó el espectáculo Villa; primeramente recibiendo un pase entre líneas de Iniesta, aunque en posición dudosa, y fusila a Casillas, 3-0. Y 3 minutos más tarde, en el 12, Messi mete un pase magistral de unos 40 metros que recibe Villa encara a y marca cruzado, 4-0.

A partir de aquí, el Madrid se desquició y el Barça lo bailó literalmente, de hecho yo pienso que si Guardiola no hubiese cambiado a Villa (que recibió una ovación atronadora) por Bojan, que marró unas buenas claras ocasiones, el marcador podría haber sido más abultado. El Barça redondeó la manita en el 90, con una contra mortal por la banda de Sergio Ramos (fatal todo el partido) que culmina en el corazón de área Jeffren, que acababa de entrar por Pedro 4 minutos antes.

En el descuento tangana de rigor, por culpa de una fea entrada de Sergio Ramos a Messi, que aún encima se encaró con sus compañeros de selección del Barça, lamentable. Por cierto el Madrid en la segunda parte tuvo dos llegadas un tiro a las nubes de Benzema y una falta de Cristiano que pasó rozando el poste. Increíble la apatía de Benzema, un jugador que costó 36 millones de euros, y luego Soldado y Negredo no valen para jugar en el Madrid, yo no entiendo nada.

Por lo demás, ya sabéis tonterías como el paripé de Guardiola con Cristiano de la primera parte o el de Messi con Carvalho; cosas que quedan en el capo como dicen los argentinos y que entretienen al personal.